Viviré lo que tenga que vivir,
pero si me preguntás yo te digo, ya no quiero vivir...
Así no, necesito otra realidad y no puedo cambiarla.
Viviré lo que tenga que vivir,
pero si me preguntás yo te digo, ya no quiero vivir...
Así no, necesito otra realidad y no puedo cambiarla.
Todo es una máscara, el pajarito no posee nada.
El pajarito está muriendo,
ya no aguanta más el invierno....
La reina suspira y grita al ver que el reloj avanzó mas de la cuenta y su deseo fue puesto en un basurero,
Sus ilusiones y su alegría del día anterior, se veían apagados completamente porque una vez más sus deseos no se cumplían,
Parecía una reina maldita, una soñadora aventurera encerrada y cautiva de su desgracia, de sus no tuve y sus miedos.
Nadie parecía merecer a la reina, y ella no tenía ni voz ni voto en ningún mandato, ni siquiera en ella misma, ni siquiera podía contener las lágrimas de las ilusiones rotas....
El día anterior imaginó sonrisas, construyó lo que sería su día, y nada se cumplió, su frustración solo traía lágrimas.
En su soledad eso era lo único que la acompañaba, y ese maldito nudo en la garganta que terminaría matándola....
-Nunca tuve padre, exclamó el perrito callejero.
-He tenido, hambre, frío y sobre todo mucha tristeza
-Cada día me levanto y con fuerza busco mi alimento, mis alegrías,
a veces alucino tanto en mi dolor, que imagino que encuentro un padre, una familia, incluso mi propio hogar...
-....pero me despierta el golpe, un golpe que no debió existir nunca, me despierta el dolor y caigo en cuenta que sigo aquí...siendo un perrito callejero que desea tener una coronita de oro...
-Deseo dejar de ser un paria, un ninguneado,
-Solo deseo abrazos, amor y un hermoso hogar....quiero volver a nacer y tener la suerte de no ser un paria...tener toda la suerte del mundo, eso quiero....
.....ojalá no tuviera que nacer de nuevo, y pudiera encontrar-