Hombre de muerte, has dejado el silencio en mis oídos
Hombre de muerte, un saco de odio se han vuelto mis imágenes con el recuerdo
Llorar no sirve nada, pero he de confesar que a veces lo hago
Hombre de muerte, aquí voy escapando y olvidando, tus ojos, y tus manos
Hombre de muerte deseara un destino funesto para tu alma, pero es la mía la que se ahoga en ese destino