-- Ha sido un día intenso, me fue bien...me gusta lo que hago...
- ¿Y qué sucede por qué de repente te veo así?
--He sentido ganas de llorar hoy...pero me contuve tomé fuerzas de mi “yo”, del corazón, que se yo, y entonces no lloré...
-Ahora lo haces...
--Es distinto ahora. Estás vos
-Estoy si, estás, eso es todo
--Cyrano se fue
-Así lo quisiste
--No... sucede que, hay cosas que no logro hacer diferentes
-Tus lágrimas están por derramarse sobre tus mejillas....ya lo hicieron....sobre la cama
--Necesito ser feliz...
-¿No lo eres?
--Lo único que me hace feliz ahorita es trabajar....no tengo nada más....
-Me has dicho que eso te asusta
--Sí...porque... porque no tengo nada....
-Vamos, ¿qué actitud es esa?
-Decime
-Sos como el zorro del principito
--Quizá algún día me domestiquen, pero se irá, se irá a su estrella, con su flor
-Tal vez prefiera quedarse con el zorro
--Hay miles de rosas, el le gustan las rosas, y tiene rosas muy bellas
-Las rosas tienen espinas. Vos sos un zorro, con el alma ardiendo, con tantas ganas y pasión
--Solo seguiré
-Seguí, espero encontrés alguna razón pronto
--Yo también, porque siento que estoy muriendo....
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